Es una enfermedad altamente contagiosa. En algunos individuos (especialmente, embarazadas y bebés en gestación) puede ser grave por lo que la vacunación es vital para prevenirla. Está causada por un virus que se propaga a través del aire o por contacto cercano y se manifiesta a partir de erupción en la piel (el sarpullido rojo característico. Una persona infectada puede transmitirla a otras desde una semana antes de la aparición de la erupción hasta 1 a 2 semanas después de…