Visitamos a personas afiliadas con la enfermedad ELA.

Cada 21 de junio se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) con el objetivo de difundir información y visibilizar esta  enfermedad. En este marco, acompañando a las y los afiliados junto a sus familias y redes de contención, el equipo territorial de Agentes Sanitarios del programa IOMA A TU LADO realizó visitas domiciliarias el 17, 18 y 19 de junio.

En cada visita se buscó robustecer el vínculo con la obra social y acompañarlos en su proceso de salud-enfermedad, acercarles la vacuna antigripal y orientarlos en la solicitud de sus prestaciones. Cabe destacar que actualmente IOMA brinda cobertura a 81 afiliadas/os diagnosticados con ELA.

Asimismo, desde el Programa “IOMA A TU LADO” se realiza diariamente el seguimiento de los trámites de las y los afiliados con esta afección, asesorándolos sobre cómo solicitar medicamentos con el 100% de cobertura, realización de prácticas médicas y demás prestaciones. Además IOMA garantiza los tratamientos medicamentosos mediante coberturas con plan MEPPES, Plan Ambulatorio y -en ciertos casos- con trámites con autorización por vía de excepción.

Este programa, al igual que otras coberturas de IOMA, se sustenta en un sistema solidario de salud, garantizando el acceso y el derecho a la cobertura para todas las personas afiliadas, independientemente de su aporte económico.

 Prestaciones que brinda IOMA a pacientes con ELA

Provisión de lector ocular, silla motorizadas y clásicas; internación domiciliaria; estudios deglutorios; medicamentos (Meppes, ambulatorios y de compra directa); kinesiología, fonoaudiología, terapia ocupacional, psicoterapia, enfermería.

¿Qué es la ELA?

Se trata de una dolencia neurodegenerativa, crónica y progresiva que no tiene cura, por lo que necesita tratamiento de por vida.
Es una enfermedad neurológica progresiva que afecta a las neuronas motoras, generando debilidad muscular.

Con el tiempo, en la ELA, estas neuronas se desgastan o mueren, perdiendo su capacidad para comunicarse con los músculos. A causa de ello, la persona afectada comienza a sentir debilidad muscular, espasmos y, finalmente, la imposibilidad de mover los brazos, las piernas y el resto del cuerpo.

Cuando los músculos del tórax se ven afectados, la respiración se vuelve difícil o incluso imposible.

Los síntomas de la ELA generalmente comienzan después de los 50 años, aunque pueden manifestarse en personas más jóvenes.

La enfermedad se caracteriza por una pérdida progresiva de fuerza muscular y coordinación, lo que eventualmente hace que las actividades cotidianas, como subir escaleras, levantarse de una silla o tragar, sean difíciles o imposibles de realizar.

La debilidad puede comenzar en diferentes partes del cuerpo, como brazos, piernas, o afectar la capacidad para respirar o tragar.

A medida que la enfermedad progresa, más grupos musculares se ven comprometidos.

No afecta los sentidos de la vista, olfato, gusto, oído y tacto.

La mayoría de las personas con ELA mantienen sus capacidades cognitivas normales, aunque un pequeño porcentaje puede desarrollar demencia, lo que ocasiona problemas de memoria.

Seguinos en nuestras redes sociales