El vocal del directorio Adelqui Del Do moderó la mesa de exposiciones en la presentación del libro “Consumos Problemáticos y Derechos Humanos, Perspectivas Comunitarias”. Con un panel integrado por el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak; la viceministra Alexia Navarro; y la subsecretaría de Salud Mental, Julieta Calmels, la actividad tuvo lugar en la ciudad de La Plata. En cada capítulo, reconocidos referentes en el campo de la salud brindan herramientas para pensar el consumo problemático en los contextos actuales, desde una perspectiva de derechos.
En ese marco, Kreplak señaló que ”el libro ofrece herramientas, no estamos repitiendo un dogma que viene de afuera, estamos produciendo cosas. Hablar de Derechos humanos cuando hablamos de consumos problemáticos, es sentir esa hermosa nostalgia que sentimos en estos días con la condena de Cristina, de recuperar eso que teníamos hasta el 2015. Ejes de los derechos humanos como política de estado que atraviesa todas las políticas públicas. Y en esto Adelqui y Julieta son una autoridad en Argentina”. Además, destacó que “esto surge de una diplomatura, un sistema de formación argentina incomparable, que nos da carreras universitarias en todo el territorio de la mejor calidad e invita a militar o a sumarse a algo mucho más colectivo. Este libro es una historia alucinante, de trabajadoras y trabajadores de la salud mental argentina. Ahora lo quieren negar, pero Argentina es y siempre ha sido un lugar de altísimo nivel de estos trabajadores, con capacidad de transformación social, pero también reflexiva. Tenemos grandes pensadores a nivel internacional, cuya base es la salud mental. Hay que sumar esta capacidad reflexiva y de trabajar en comunidad, usar categorías analíticas y refutars, para la construcción de este proyecto”.
En otro tramo de su intervención, el ministro dijo: “no somos delirantes, aunque luchar por una utopía nunca es un delirio, sino una necesidad. Venimos de una trayectoria o tradición, somos herederos de la tradición Carrillista (por Ramón Carrillo), de transformación social, que se toma todo el trabajo del mundo en pensar en su población, hacerlo comunitariamente y correr los límites de lo posible. No hay que ponerse a analizar lo que dice Milei, que habla de salud mental sin saber absolutamente nada, como en la mayoría de las cosas, hay que evitar analizarlos a ellos, porque tenemos un proyecto de país muy grande, lleno de personas muy interesantes, y las transformación o desarrollos progresivos o progresistas de los pueblos necesitan de mucho trabajo y participación de quienes lo lleven adelante. Las transformaciones regresivas necesitan de represión y una decisión vertical. El experimento del libertarismo en salud es lo que pasa con el consumo problemático: una ausencia del estado, de reglas, solo una mirada punitiva”.

En tanto, Alexia Navarro, viceministra de salud aseguró: “es un libro que como trabajadora del sistema de Salud, y como médica nos interpela completamente. Este libro cuestiona el modelo biomédico, tutelar, de castigo que históricamente tuvo el sistema de salud sobre los usuarios que atraviesan situaciones de consumo. Este libro viene a repensar las prácticas y cómo nos formamos en la facultad sobre esta problemática, entre otras cosas. Nosotros como funcionarios debemos pensar cómo abordamos este tema en los hospitales, fortaleciendo los equipos de salud mental, los CPA, los centros de Salud Mental ambulatorios”.
Adelqui Del Do también remarcó que al libro “lo compilamos con Cecilia Calloway. Se refiere a la importancia de abordar desde el Estado los consumos problemáticos, desde una perspectiva de derechos humanos, como viene haciendo la Provincia de Buenos Aires. Es el resultado de una diplomatura impartida en 2023 en colaboración con la SEDRONAR, la Facultad de Filosofía y Letras y Gremio FEDUBA, del cual integro la comisión directiva. La diplomatura surgió de un diálogo con Gabriela Torres, entonces secretaria ejecutiva de la SEDRONAR, con el objetivo de ofrecer formación no solo a profesionales de la salud, sino también a referentes gremiales y sociales que trabajaban en la temática en los barrios. Se diseñó para ser accesible, gratuita y federal. La diplomatura despertó gran interés, con 5.000 inscritos y 2.000 participantes que la completaron. A pesar de los desafíos administrativos que supuso para la facultad, la experiencia fue muy positiva. Fue una muy grata experiencia. En diciembre de 2023, cuando estábamos terminando la diplomatura, lamentablemente ganó Milei. En ese contexto, charlando con compañeros dijimos “pongamos en valor esta diplomatura, seleccionemos algunas clases”. Está el valor académico con clases de Alicia Stolkiner. Julieta Calmels, Alfredo Carballeda, Roxana Amendolaro, compañeras y compañeros con mucha experiencia académica y en gestión. Además, Milei, en ese momento, se había referido a la salud mental, consumos problemáticos diciendo “el que se quiera matar que se mate, el que se quiera reventar drogándose que lo haga, siempre y cuando no le pase factura al estado” y todo el ataque a la salud pública y la educación pública. Dijimos bueno, tenemos que buscar una herramienta que nos permita discutir y debatir la importancia de la salud pública y la educación pública, y la importancia de los derechos humanos, la perspectiva de género para pensar temas tan complejos como las adicciones y los consumos problemáticos desde una perspectiva de derechos”.
Asimismo Julieta Calmels, subsecretaría de Salud Mental, Consumos Problemáticos y las Violencias en el Ámbito de la Salud del ministerio de salud provincial se refirió a que “históricamente, se asoció a los consumos desde una mirada más punitiva, de persecución del narcotráfico, toda una etapa en donde se hablaba, incluso, en un lenguaje que hoy nos parece extraño de las dos caras de la misma moneda, de la oferta y la demanda, que generó un inmenso fracaso. No sirvió para perseguir el narcotráfico ni para tratar el problema de los consumos, que tiene otra forma de pensarse y abordarse. Por eso, a lo largo del tiempo, se fueron logrando algunos pasos que permitieron despegarlo de la problemática del narcotráfico, pasando a plantear los consumos dentro del campo de los cuidados. Esa es la perspectiva desde la cual queremos pensar el problema. El tema de los consumos es muy complejo y está atravesado por múltiples aspectos y, también, mucho por la moral social que considera que aquel que consume tiene la responsabilidad absoluta sobre sus actos. La relación con los consumos se piensa como algo a lo que las personas acceden para aliviar el sufrimiento humano. Muchas veces es así, pero también hay muchas otras explicaciones y que tienen que ver con la búsqueda de otras cosas, por ejemplo, la de placer y la de experiencias sensibles, que permitan sentir el cuerpo, experimentar vivencias y encontrarse con los otros. A la fragmentación del sistema de salud en el campo de los consumos problemáticos se le suma una heterogeneidad de actores que históricamente no son pensados como propios del sistema de salud, pero que intervienen en los cuidados, la atención y en procesos de internación”, concluyó Calmels.
En relación al rol de la obra social, Adelqui Del Do indicó que “Es cierto que aumentó la demanda en salud mental y en relación a los consumos por la crisis que ha generado el gobierno nacional. Para la obra social es fundamental abordar esta temática, en un contexto de aumento de demanda. Pensarlo de manera integral, articulando con lo que viene haciendo la Provincia de Buenos Aires”.
Cabe destacar que el libro se puede descargar de manera gratuita en formato de PDF o de eBooks, y también está a la venta.